La lana de acero es un conjunto de hilos de acero que se utiliza para realizar trabajos de acabado, limpieza y reparación de la madera o metal. Te permite retirar lacas, pinturas, barnices o ceras y funciona como pulidora manual sin dañar la superficie. Según el material a tratar, habrá que escoger lana más gruesa o más delgada.
Las lanas de acero se caracterizan principalmente por su gran versatilidad, ya que tienen una gran variedad de usos, pero si nos centramos en el sector de bricolaje, destacamos los siguientes usos:
Te permite conseguir un lijado suave, logrando así un acabado fino y suave, tanto en mobiliario de pequeñas y grandes dimensiones como en objetos personales que requieren una limpieza cuidadosa.
Se utiliza para decapar, ya que en lugar de utilizar una rasqueta para retirar el gel, es recomendable utilizar lana de acero que te permitirá retirar el producto fácilmente.
Se utiliza para afilar, gracias a su composición, te permitirá afilar diferentes objetos, así como unas tijeras
Para lustrar metales que se encuentran en un estado de corrosión, consiguiendo relucir los materiales desgastados y en mal estado.
Limpiar crayón o lápiz de cera incrustado en la pared o en cualquier superficie.
En definitiva, la lana de acero se usa principalmente en trabajos de bricolaje para suavizar y pulir todo tipo de superficies de madera y metal, con la finalidad de dejar acabados impolutos.
Actualmente encontramos 3 tipos de lana d'acer en el mercado:
Lana de acero fina Nº0000, ideal para pulir, abrillantar y lijar acabados delicados, así como barnizados, pulidos, decapados, etc.
Lana de acero media Nº0, es idónea para limpiar y eliminar todo tipo de manchas, además de lijar madera y metal.
Lana de acero gruesa Nº2, perfecta opción para eliminar restos de obra, decapar y preparar superficies.