Comprar broca para azulejo y cristal
Las brocas para azulejos y cristal son ideales para la perforación de vidrio, cristal, espejos, cerámica, porcelana, etc. Se recomienda su utilización conjuntamente con un soporte de taladro para realizar un trabajo de precisión y evitar posibles daños al taladrar.
Las brocas para cristales y azulejos están fabricadas con acero de alta calidad CT con placa de metal duro en forma de lanza de rectificado exacto y vástago redondo.
¿Como utilizar una broca para cristal?
Antes de ponernos manos a la obra y empezar a perforar un cristal o azulejo, es necesario que tengamos en cuenta los siguientes aspectos:
- Siempre taladrar hacia la derecha sin percutor.
- Taladrar a muy bajas revoluciones y con poca presión sobre el material.
- Utilizar agua, petróleo o trementina para la refrigeración.
Características de las brocas para cristal
Las brocas para cristal se caracterizan por los siguientes aspectos:
- Están fabricadas con materiales muy duraderos y resistentes, así como el carburo tungsteno, que se considera uno de los materiales más duros.
- Tienen forma de lanza, para perforar con mayor facilidad y precisión.
- Encontramos brocas para cristal desde 3 mm de diámetro hasta 12 mm, para adaptarse a todas las necesidades de los diferentes proyectos de bricolaje.
¿Como perforar con una broca azulejo?
Para perforar un cristal o azulejo, es necesario que previamente te equipes para evitar cualquier tipo de accidente, por lo tanto, lo primero que deberás hacer será colocarte unas gafas protectoras y unos guantes para manipular el taladro con mayor seguridad.
Una vez te hayas equipado, deberás seguir los siguientes pasos:
- Coloca la pieza de cristal sobre una superficie de madera para evitar dañar la mesa de trabajo.
- Señala la parte que desees perforar.
- Coloca la broca azulejo en la señalización y gírala realizando un poco de presión, de esta manera la broca quedará fijada y no se desplazará.
- Bordea el agujero con plastilina y rellena el interior con agua.
- Acopla la broca al taladro y empieza a perforar despacio, de manera constante y sin percusión, con la finalidad que el cristal no se rompa.