Mecanismos

En Fesmés encontrarás la mejor selección de mecanismos eléctricos de superficie, mecanismos de eléctricos de empotrar y mecanismos eléctricos estancos para exteriores. ¡Echa un vistazo y encuentra el que mejor cubra tus necesidades!

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¿Qué son los mecanismos eléctricos?

Los mecanismos eléctricos son elementos de maniobra y bases de toma corriente, es decir, elementos fundamentales que toda instalación eléctrica debe tener.

Por un lado, los elementos de maniobra son aquellos que realizan la función de permitir o interrumpir el paso de la corriente y, por lo tanto, forman parte de estos elementos los interruptores, conmutadores, cruzamientos, pulsadores, etc.

Por otro lado, las bases de toma de corriente o enchufes, se encargan de alimentar  a cualquier dispositivo que se conecte a él.

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Si te estás planteando renovar la instalación eléctrica de tu vivienda o bien, acabas de reformar el hogar y necesitas incorporar una instalación eléctrica nueva, ¡has dado con el mejor sitio!

En FESMÉS encontrarás una gran variedad de mecanismos eléctricos que se adaptarán perfectamente a tus necesidades y a las de tu vivienda. ¡No te lo  pierdas y sigue leyendo!

Tipos de mecanismos eléctricos

En esta sección te ofrecemos la mejor selección de mecanismos eléctricos de distintos tipos y estilos, con la finalidad de que se adapten completamente a tu hogar, entre los cuales destacamos los siguientes:

  1. Mecanismos de superficie, son mecanismos que se caracterizan por colocarse fuera de la propia estructura, es decir, en lugar de ir empotrados a la pared, se colocan atornillados, siendo así una instalación muy sencilla y sin complicaciones.
  2. Mecanismos de empotrar, son mecanismos que permiten una integración idónea, y, además de realizar su función, consiguen mejorar la estética y aportar un toque decorativo diferencial.
  3. Mecanismos estancos de exterior, son mecanismos específicos para colocar en el exterior de la vivienda, ya que son resistentes a las inclemencias meteorológicas y, por lo tanto, no se ven dañados a causa de la humedad, el agua o el sol porque cuentan con una tapa protectora que los hace resistentes.